viernes, 22 de marzo de 2013

MADRES



Hoy voy a hablar de nosotras las MADRES.

Yo no sé vosotras pero yo odio a la madre de Calliou, entre otras madres de los dibujos. No sé quien es el guionista pero es para matarlo. Esa mujer no es normal. Es tan perfecta que es insoportable.

Yo no he visto a madre que hable con tal languidez extrema a un hijo. Es que te descompone. Nunca pierde los nevios, ni grita ni riñe a sus hijos. Lo máximo que he visto es que frunce el ceño y le dice a Calliou: "no, Calliou" pero con tal hilo de voz que su cara de "enfado" se queda en nada. Y un "NO" en 250 capítulos!!!!

Antes de tener a mini-yo decía que iba a ser una madre, muy madre. A "muy madre" me refería a una madre un poco fuera de lo común a lo que era habitual. Es decir; una madre en la que primara la educación respetuosa, con las mil atenciones, ritmos y no la disciplina militar y el estar sólo con los quehaceres de la casa a expensas de la familia (sí, soy de esa quinta)

Yo iba a ser una madre, muy madre. En mi imaginación solo estaba el jugar, saltar, morirnos de la risa, que viniera solita a mi cuarto porque quería leer al lado de mami, salir al parque, comer...vaya, cero problemas ni dolores de cabeza.

Hasta que aterrizas de morros con la realidad: un NIÑ@! Con lo que conlleva: resfríos, no dormir, no comer, atenciones constantes, travesuras, las desobediencias...Lo normal vaya! Ahí me di cuenta que no podía estar al 200% todo el día, ni no estresarme o reñir a mini-yo. Incluso que de mi boca salieran sapos y culebras. Es decir, lo normal en una madre común.

Yo sé que tengo muchas partes de mi faceta de madre, "muy madre" porque lo primero es mini-yo con todas sus consecuencias y odio el gritar, la disciplina pura y dura, los constantes "NO" pero es inevitable.

Veo los dibujos y me hago cruces. Odio a la madre de Calliou. No pierde la compostura nunca. Siempre habla suave. También ayuda que Calliou es bastante bonachón y muy obediente pero no es normal. Ni la una, ni el otro.

La madre de Dora es otra. Si hija, sal, explora, tu solita acompañada de un mono. Pero qué madres son estas? Yo no dejaría ir ni a la esquina sola a la peque y menos con un mono! Luego está Noddy. Ahí no aparece la madre pero si un duende con tutoría de padre y, como no, también educa al pequeño duende de manera exquisita. Y luego Pocoyó, que obedece al dedillo a una voz.

En definitiva, que por mucho que queramos respetar a los chiquitines y ser estupendos como padres siempre perfectos y cordiales, ES IMPOSIBLE.

Odio a la madre de Calliou.

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